La planificación del huerto es una actividad útil y determinante para optimizar cada acción que llevemos a cabo. Pero sino no tienes la menor idea de lo qué debes hacer, no te preocupes, te diremos todos los aspectos que debes considerar y las decisiones que debes tomar para que tus plantaciones se desarrollen perfectamente durante todo el año.
Como ya sabes hacer un huerto no es una tarea improvisada, así que sin más preámbulos comenzaremos a hablar sobre esos puntos claves que debes seguir para la planificación del huerto, sería buena idea que buscaras una libreta y un lápiz para que de una vez empieces con esta gratificante actividad como es el cultivo de tus propias plantas.
Calendario de Siembra anual
Tener un calendario de siembra del huerto es indispensable para realizar en la fecha correspondiente, las actividades de plantar, trasplantar y lo más hermoso y satisfactorio: cosechar las hortalizas, frutas y demás plantas especialmente aquellas de ciclo largo que se llevan el año completo.
Aspectos que debes tener en cuenta para el calendario y la planificación del huerto
Para empezar a planificar el calendario del huerto se debe decidir varios aspectos antes de empezar a cultivar:
La localidad o región donde vivimos.
Este punto se relaciona directamente con el clima que prevalece en el sitio donde está ubicado el huerto. Las condiciones climáticas determinan el tipo de cultivo que se ha de plantar, el lugar donde se harán los semilleros, la combinación de plantas que iniciaran la temporada, etc.
Además cuando estas condiciones climáticas varían drásticamente, son muchos los desafíos a los cuales nos enfrentamos. Plasmarlas en el calendario de siembra anual es indispensable. El suelo cambia con la variación de la temperatura ambiental, las lluvias, la humedad, las heladas nocturnas teniendo un impacto importante en los cultivos.
Luz solar
Lo ideal sería orientar el huerto hacia el sur, asegurarnos de ubicar las plantas más altas hacia el norte para evitar que ellas les den sombras a los cultivos de menor tamaño. Es realmente importante que a las plantas les de la mayor cantidad de luz solar posible.
En definitiva, independiente de la orientación que tenga nuestra casa o departamento, nuestro huerto debe tener luminosidad, porque sin ella no hay fotosíntesis, forma de alimentación de las plantas, así que si quieres que tus plantas se desarrollen bien este es un requisito fundamental.
Por ejemplo si en verano cultivamos lechugas, acelga, cilantro o rúcula sabiendo que lo que más nos interesa es el desarrollo al máximo de sus hojas, entonces la exposición a la luz debe dosificarse ya que también en verano se presenta la sequía y estas dos condiciones causan mayor producción de semillas y menos hojas, eso no es lo que deseamos.
Mientras que el tomate, el ají, el melón son plantas que se benefician de la luz del sol de manera prolongada y su cosecha es bastante fructífera. El calendario de siembra es la herramienta adecuada para llevar a cabo las actividades del huerto con mayor precisión y éxito.
La temperatura
Para programar el calendario anual de siembra también es bueno considerar la temperatura al momento de realizar los cultivos. Si es la adecuada, las plantas crecerán de manera óptima. En tiempo muy frío, se recomienda el uso de los invernaderos o el uso de cobertores plásticos sobre el cultivo para proteger las plantas de las heladas (Aquí puedes ver nuestra guía con los mejores invernaderos para huerto). En tiempo de calor, el riego junto al acondicionamiento del terreno con el mulch, se retiene la humedad de la plantas por más tiempo evitando que se marchiten y se retrase su crecimiento.
En clima árido y semiárido con temperaturas muy altas, la temporada de verano es bastante larga, esto es muy bueno para plantar los árboles frutales especialmente cítricos, olivos, durazno, mango que se ven favorecidos si tienen un buen sistema de riego y suelo profundo.
Necesidades de riego
Lo más recomendable es agrupar las especies de acuerdo a sus necesidades de riego de agua, de esa manera evitaremos esforzarnos de más al momento de regar nuestras plantas. Te recomendamos leer también nuestra guía de riego en el huerto y ver nuestra selección con los mejores programadores de riego.
Especies a cultivar
Son muchas las plantas que puedes cultivar en un huerto: frutas, flores, verduras, hortalizas, plantas medicinales y aromáticas, en fin las alternativas son realmente muy variadas, así que elige cuál son tus favoritas, te puede servir leer ¿Que plantar en un huerto urbano?
Necesidades de sustratos
Es importante que tengas en cuenta las necesidades de volumen de sustrato que requiere cada planta, bien sea que esté plantada en macetas o en mesas de cultivo.
Compatibilidad entre los cultivos
Aunque parezca complicada la compatibilidad entre los cultivos es un aspecto muy importante y al mismo tiempo muy fácil de realizar, para ello solo se debe combinar algunas especies en un espacio del cultivo con la intención de obtener algunos beneficios como la resistencia ante plagas, así como el aprovechar mejor el espacio.
Ciclo de vida
Es oportuno que investigues sobre el ciclo de vida de las plantas que deseas cultivar, investigar sobre cuál es la mejor época para sembrar, conocer el tiempo de germinación. Además hay algunos cultivos que requieren ser cultivados en un semillero y luego trasplantarse, así que debes saber cuánto tiempo estarán listos para ser trasplatados.
Rotaciones
La rotación de cultivos se trata de ir cambiando la ubicación de los cultivos temporada tras temporada, en otras palabras es una mudanza, con la intención de prevenir las plagas y además para no agotar los nutrientes del suelo, y más bien aprovecharlo al máximo y que cada año en nuestro huerto esté abunde los cultivos.
La rotación es sencilla pero debe seguir un orden, ya que cada grupo requiere de unos determinados nutrientes, y presentan un sistema radicular especifico. Pueden seguir el siguiente: en primer lugar las leguminosas, luego las hortalizas de fruto, en tercer las hortalizas de hoja y por último las hortalizas de raíz, existen otros métodos así que puedes elegir el que mejor te parezca. Aquí puedes ver mas en detalle en que consiste la rotación de cultivos en el huerto.
Elaboración del plano del cultivo
No se puede hablar de planificación de huerto sin contar con un plano del cultivo, ya que esta herramienta es vital para poder tener una idea visual de cómo será la distribución del espacio, según las necesidades de agua, luz y también nos permite planificar de una vez como haremos las rotaciones de cultivos en las próximas temporadas.
Planificación del huerto según la estación del año
Como bien ya lo hemos dicho la planificación es imprescindible para organizar tu huerto y aprovechar al máximo cada espacio dentro de él.
A continuación hablaremos sobre cuál es la mejor estación del año para iniciar un huerto, las especies que se pueden sembrar según la época, entre otros datos de interés, así que te conviene seguir leyendo.
También puedes usar un planificador de huerto.
El huerto en Primavera
La primavera es el mejor momento para iniciar un huerto, en esa época resurgen todas las plantas tras el invierno después de estar detenidas por la inclemencia de las bajas temperaturas. Al inicio de esa estación se debe realizar todas las siembras que se quieran cosechar durante el verano y principios de otoño.
Asimismo durante esta estación que abarca los meses de marzo, abril, mayo y junio es oportuno realizar acolchados a todas las plantas y cultivos, con la intención de que se conserve la humedad del suelo en los próximas días de verano. Además, durante esta época también hay mayor necesidad de abono y control de plagas.
Durante la primavera se puede sembrar casi que de todo por ejemplo berenjena, tomate, calabacín, acelga, espárragos, lechugas, melón, judías, remolacha, sandías, zanahorias, entre muchas otras más. Así que ya depende del espacio que se disponga
Planificación del huerto en verano
Posterior a la primavera, que es en donde realizamos la preparación del suelo, lo abonamos y sembramos, llega el verano de mediados de junio a septiembre, época en la que la temperatura aumenta y por consiguiente habrá mayor demanda de riego.
Durante esa temporada se recolectan la mayoría de los cultivos, es decir todo lo hayamos sembrado y trasplantado en primavera. Y el alcolchado que también realizamos en primavera ha permitido el crecimiento de las plantas sin escasez de humedad, pero no debemos olvidarnos de regarlas generosamente, ya que en esa época necesitan mucha agua y nutrientes.
Por otra parte, las intensas temperaturas del verano estimulan el crecimiento de las plantas aromáticas así que es importante que tengas esto presente. Al mismo tiempo, no debes descuidar que al igual que en primavera, las plagas pueden instalarse en tus cultivos así que pendiente con ello.
En el verano muchas personas toman vacaciones por lo que conviene instalar programadores de riego para que las necesidades hídricas de las plantas estén cubiertas sin requerir nuestra presencia. Y aunque el verano es la época de mayor recolección, aun así, se pueden seguir plantando y varios de ellos serán los que se recolecten durante el otoño e invierno.
El huerto en otoño
Una vez finalizado el verano, llega el otoño, de septiembre a diciembre, para el mes de octubre podremos recolectar algunos cultivos de verano como cebollas, calabacines, berenjenas, patatas. Asimismo es tiempo de mermar progresivamente el caudal de riego del huerto.
Adicionalmente, en esta estación se pueden recolectar semillas y también si te gusta realizar compost este es el mejor momento de aplicarlo sobre el huerto y el resto de las plantaciones que tengas en tu patio. Con respecto al cultivo de las plantas en sí debemos plantar aquellas que sean capaz de soportar el frío como las espinacas, lechugas, coles, repollos.
Huerto en invierno
Las estaciones anteriores son de mucha actividad, a diferencia del invierno que es una época para analizar el trabajo realizado en los meses previos y planificar lo que viene, detenernos a pensar lo que ha salido mal, y que nuevas técnicas podemos implementar en un futuro.
De igual manera, durante el invierno podemos dedicarnos a hacerle mantenimiento a los invernaderos, compostadores o también podemos cubrir los cultivos que son suceptibles a las bajas temperaturas. Y por si llueve debemos quitar los rastros de acolchados ya que pueden pudrir las raíces por excesiva acumulación de humedad.
El invierno son los meses de menor actividad de siembra y trasplante. Lo más común que se planta en esta época son ajos, guisantes, lechugas, si se cuenta con un invernaderos se puede ir realizando siembras para finales del invierno, con la idea de que en primavera se trasplante los cultivos de esa estación.
Todo depende del clima, aunque lo más común para plantar son los ajos, guisantes, rabanitos y lechugas. Si cuenta con un invernadero es buena idea ir realizando las siembras para los días próximos a la culminación del invierno.
Consejos para planificar tu huerto
Nuestra intención es ofrecerte la mayor información sobre la planificación del huerto para que aprendas a realizar de manera exitosa tus siembras, trasplantes, cosechas, sin embargo debes tener claro que lo más importante es conocer las condiciones del terreno o el sustrato del huerto, así como también el clima entre otros aspectos.
Lo ideal es que adquieras experiencia poco a poco, probando, intentándo y porque no hasta equivocándote, que seguro con la práctica serás capaz de realizar la planificación de tu huerto de forma precisa y adecuada a tus propias necesidades.
Como último consejo te podemos decir que para la planificación del huerto se debe anotar diariamente todo lo que va sucediendo, ya que de esa manera podremos crear con certeza un plan de tareas para la siembra, trasplante y cosechas desde enero a diciembre.
¿Qué se puede cultivar en un huerto urbano?
Un huerto urbano ofrece miles de posibilidades para plantar todo tipo de hortalizas y hierbas aromáticas para beneficiar a la comunidad o para ti mismo. Dependiendo de la zona y la temporada, se pueden plantar los frutos necesarios para abastecer a la comunidad.
- Ajo: El ajo crece muy bien en los climas fríos sembrado en tierra directa. Para plantarlo se debe colocar el diente de ajo a la profundidad suficiente para que la tierra lo cubra. Conviene plantarlo en grandes cantidades para poder usarlo durante todo el año.
- Guisantes: Es preferible sembrarlas en otoño y evitar las heladas. La cosecha se realiza entre mayo y junio.
- Acelga: Se pueden sembrar durante todo el año, siempre y cuando se tenga cuidado en las temperaturas muy altas o muy bajas. Es conveniente sembrar grandes cantidades para tener hojas frescas en menos de dos meses. Las raíces crecen mucho, por lo que conviene mezclarla con lechuga, col, cebolla y ajo.
- Zanahoria: Se puede sembrar todo el año, preferiblemente a finales de invierno y a finales de verano. Se deben evitar las que estén congeladas.
- Rábano: Al igual que las zanahorias, se puede plantar durante todo el año evitando las heladas. En la época de inviertno los tubérculos son más grandes y menos picantes, pero si se desean más picantes es mejor plantarlos en verano. Además el ciclo de cosecha es más corto.
- Lechuga: Se siembra fácilmente todo el año, pero en verano posee un espigado prematuro. Es importante dejar las raíces y aprovechar solo las hojas para que vuelvan a crecer. Se puede asociar con otros cultivos más largos como cebolla o tomate para aprovechar el espacio.
- Apio: Se adapta perfectamente bien al clima frío de invierno, pero florece de manera prematura. Su germinación es lenta y es importante regarlo constantemente.
- Col: Se cultiva mejor en primavera y otoño, bajo ninguna circunstancia se debe sembrar en verano.
- Coliflor: Al igual que la col, es mejor trasplantarlo para primavera u otoño y evitar hacerlo en verano. El ciclo de cosecha es de 3 meses.
- Brócoli: Como todas las plantas crucíferas, no es recomendable trasplantarla en meses muy calurosos. Es mejor hacerlo en primavera y otoño o a finales de invierno. Es recomendable plantarlos escalonados para que no estén tan amontonados.
- Cebolla: Es uno de los cultivos más sencillos e infaltables en todos los huertos. Es recomendable comenzar haciendo el semillero a finales de otoño y comenzar a plantarlo a finales de invierno.